Cómo aprender a ahorrar dinero: consejos para niños
Esta pequeña guía de cómo aprender a ahorrar dinero para niños está especialmente dirigida a aquellos padres cuyos hijos tienen edades inferiores a los ocho o nueve años, aunque también puede servir para los ‘peques’ de más edad que aún no han adquirido el hábito del ahorro.
Por qué deben aprender los niños a ahorrar
Los padres son quienes han de sentar las bases sobre las que los hijos puedan construir unos hábitos de comportamiento que aseguren que les vaya lo mejor posible en la vida adulta. Y está muy claro que sin un conocimiento práctico del dinero, es muy difícil que a alguien le vaya bien en la vida.
Los conocimientos prácticos más básicos del dinero son tres: cómo ganarlo, cómo ahorrarlo y cómo gastarlo con inteligencia. Con esta guía les enseñaremos las tres cosas de manera simultánea.
Cómo enseñar a los niños a ahorrar dinero
Pero para que ellos entiendan esas tres cosas y conozcan la forma de ahorrar dinero si eres niño, habremos de realizar una acción previa:
Mostrarles lo que es el dinero y para qué sirve desde las edades más tempranas
Cuanto antes se inicie el proceso de educación financiera de un niño, mejor. Las lecciones deberían empezar antes de los siete años porque es entonces cuando comienzan a formarse los hábitos y actitudes respecto al dinero.
Una vez que tus hijos son lo suficientemente mayores como para saber que no deben meterse monedas en la boca, hay que presentarles las monedas y el dinero en efectivo, explicándoles qué es el dinero y cómo se utiliza: paga tus compras delante de ellos y explícales que hay cosas que cuestan más y menos dinero.
Con este sistema, un niño de solo 5 años ya estará capacitado para conocer qué es y para qué sirve el dinero.
Posteriormente, es el momento de explicarles que tienes el dinero guardado en un banco y que por eso puedes pagar con tarjeta. Explícales que en el banco tienen apuntado cuánto tienes y que cuando pagas con tarjeta, restan el importe de la compra y apuntan cuanto te queda después de comprar.
Inculcarles hábitos de ahorro
Es entonces la hora de enseñarles las formas de ahorrar para niños e inculcarles los hábitos de ahorro. Por eso es importante que sepan desde muy pequeños que recibimos una cierta cantidad de dinero por trabajar, pero no todo el que queremos.
Así entenderán que no podemos gastarlo todo, porque entonces nos quedaremos sin nada. Y que el dinero no es solo para gastar, sino que también debe ahorrarse regularmente para tenerlo.
Ayudemos a los hijos a adquirir el hábito de ahorrar dándoles una hucha o una caja con cerradura donde puedan depositar monedas o dinero en efectivo. Y habituémoslos a que cuenten regularmente su dinero o apunten cuánto tienen para que vean que la cifra aumenta.
Expliquemos que cuanto más ahorren, más dinero tendrán disponible para comprarse un determinado capricho, un juguete o una prenda.
Otra forma de hacerlo es marcándoles objetivos a corto plazo: comprar un pequeño juguete en una fecha determinada, por ejemplo, para que comprueben que ahorrando han podido hacerlo y que su dinero disponible no ha disminuido desde que se marcó el objetivo.
Todas estas actividades sobre el dinero para niños son muy efectivas: a medida que crezcan, ellos mismos serán capaces de ahorrar y de marcarse objetivos a largo plazo.
Hacer que tengan oportunidades para ganar dinero
Una vez llegados al anterior punto, hemos logrado nuestro objetivo más elemental. Pero si no lo reforzamos con otras acciones, el niño no sabrá tomar decisiones sobre su uso y sucumbirá a las tentaciones de gastar sus ahorros en cosas que, aunque le apetecen, no necesita.
Por eso es preciso que dispongan de una paga fija de un importe razonable para que observen y experimenten lo que ocurre si se gasta más de lo que se ingresa. Nunca debe dárseles dinero adicional a la paga aunque nos lo pidan.
Respecto a la paga, es aconsejable exigirles que realicen ciertas tareas como recoger su habitación a diario, lavarse los dientes y aprobar en la escuela. De esa forma comprenderán que si no realizan su trabajo, no cobran.
También podemos darles dinero a cambio de realizar encargos especiales, como pueda ser lavarnos el coche un día del fin de semana o hacer los recados. Eso aumentará su percepción de que ganar dinero requiere esfuerzo.
Una cosa bien diferente es el dinero adicional que puedan recibir de sus familiares en casos como los de los cumpleaños: lo lógico es que sean ellos quienes decidan si quieren ahorrarlo o gastarlo, pues se trata de un regalo.
Ayudarles a tomar decisiones de gasto inteligentes
Enlazando con lo anterior, el siguiente paso es decirles que la paga es todo el dinero que recibirán y que son ellos mismos los que deben administrarla.
Les enseñaremos a llevar una cuenta de ingresos y gastos: apuntando lo que reciben y lo que gastan, se darán cuenta de que no es posible gastar todo lo que se desea y que hay que ser inteligente y previsor a la hora de realizar compras.
Complementaremos esto advirtiéndoles que, antes de comprar nada, hay que comparar precios, puesto que las cosas son más caras en unas tiendas que en otras y lo mismo sucede con las marcas de los artículos que adquirimos.
Mantener un comportamiento coherente con lo enseñado
Es fundamental controlar la forma en la que manejamos el dinero cuando ellos están presentes. Por ejemplo, si nos quejamos de que tenemos muchos gastos, pero a continuación nos vamos de compras, estaremos enviando mensajes contradictorios.
Es decir, si queremos que nuestros hijos desarrollen unos buenos hábitos de gasto y ahorro, tienen que vernos tomar decisiones consecuentes de ahorro y gasto.
En resumen, esta guía de cómo aprender a ahorrar dinero para niños será mucho más efectiva si los pequeños de la casa comprueban que sus mayores practican lo que predican y reciben continuamente mensajes claros y coherentes sobre el gasto y el ahorro.