¿Qué es la arqueología?
La arqueología es la disciplina que consiste en excavar artefactos y edificios antiguos para conocer mejor la historia de la humanidad. A menudo se considera un tipo de ciencia, aunque se basa más en la interpretación y las comparaciones cruzadas que en la construcción de hipótesis y la experimentación.
La arqueología es una disciplina imperfecta, ya que las excavaciones sólo recuperan un pequeño porcentaje de los artefactos originales y diferentes investigadores pueden tener interpretaciones contradictorias de las pruebas que descubren. Sin embargo, gracias a la arqueología hemos podido aprender mucho sobre la historia y la prehistoria de la humanidad.
Los humanos modernos existen desde hace al menos 200.000 años, pero la arqueología ha descubierto datos sobre nuestros antepasados aún más antiguos, como los miembros de las especies Homo habilis y Homo erectus. Gracias a la arqueología (así como a las excavaciones de fósiles), sabemos cuándo ocurrieron estos acontecimientos y en qué regiones.
La arqueología moderna sólo se remonta a principios del siglo XIX. Desde entonces, algunos de los hallazgos arqueológicos más interesantes han sido: el descubrimiento de antiguas tumbas reales egipcias, mayas y chinas, completas con toneladas de artefactos, destinadas a acompañar a los reyes en la otra vida; restos de asentamientos que indican que los vikingos llegaron a América ya en el año 19, casi 1000 años antes que Colón.
CAMPOS DE INVESTIGACIÓN PARTICULARES: ARQUEOLOGÍA AMBIENTAL
La arqueología ambiental estudia los aspectos físicos y biológicos del medio ambiente y las interacciones entre las actividades humanas y el entorno natural a lo largo del tiempo. Las primeras investigaciones se remontan al siglo XIX, aunque se limitan al ámbito de los estudios prehistóricos.
La arqueología ambiental, por su parte, surgió pronto en el norte de Europa y en Estados Unidos, donde los estudiosos eran más sensibles a los aspectos interdisciplinarios y al potencial de los estudios ambientales.
El movimiento estadounidense conocido como Nueva Arqueología o Arqueología Procesal, que reconoce a la arqueología como una disciplina científica más que histórica, dio un gran impulso a la arqueología ambiental. Desde los años 50, también se ha producido un continuo perfeccionamiento de las técnicas de recuperación de restos orgánicos y de los análisis de laboratorio, así como avances en los sistemas de tratamiento de datos.
La arqueología ambiental abarca varias disciplinas: La bioarqueología, que estudia los restos orgánicos y que, a su vez, se subdivide en arqueobotánica y arqueozoología, que se ocupan, evolución respectivamente, de los restos vegetales y animales en contextos arqueológicos; la antropología física, que estudia los restos humanos; y la geoarqueología, que se ocupa del amplio campo de los restos inorgánicos (investigación de los cambios en el nivel del mar y de la n morfológica del paisaje, investigaciones sobre suelos y sedimentos, estudios sobre los procesos de formación de los yacimientos arqueológicos).
CAMPOS DE INVESTIGACIÓN PARTICULARES: ARQUEOLOGÍA BÍBLICA.
La arqueología oriental tiene como objetivo una mejor comprensión de los textos bíblicos, cuyos límites cronológicos van desde la época de los patriarcas (siglo XVIII a.C.) hasta el siglo I d.C, en una zona geográfica que incluye a Palestina y las zonas de Oriente Medio estrechamente relacionadas con ella.
La arqueología bíblica identifica localidades bíblicas, reconstruye el entorno en el que vivían los personajes bíblicos, confirma detalles al cotejar un personaje o episodio bíblico en documentos históricos de otros pueblos orientales y proporciona vínculos con documentos literarios y arqueológicos de estos pueblos.