La definición de especie hace referencia a un conjunto formado por elementos semejantes que tienen uno o más caracteres en común. La palabra, proveniente del latín species, es comúnmente usada en distintos contextos, como por ejemplo los géneros de animales o especies de plantas.
El término también puede ser utilizado como sinónimo de tema, proposición, caso o asunto, o haciendo referencia poco clara de algo, por ejemplo: “El actor usó una especie de máscara sobre el rostro”.
Especie en la zoología y en la botánica
Dentro de la zoología y la botánica, las especies son los grupos en que los están divididos los géneros. Los miembros de una misma especie biológica comparten ciertos caracteres que son generales, además de otros factores, que les hacen ser semejantes entre sí y de esta forma poder distinguirse del resto de las demás.
Resulta de suma importancia estar conscientes de que existen muchísimas especies en peligro de extinción, en general por culpa de alguna acción humana como la caza, la destrucción de su hábitat natural. Un ejemplo es el oso polar, que constituye una de las múltiples especies en riesgo de extinción.
¿Por qué clasificar a la especie?
Al momento del análisis y la clasificación de los diversos organismos que forman parte de la vida sobre nuestro mundo, el objetivo que se plantean los observadores y científicos, es conocer más a fondo acerca del propio planeta, de su pasado y también de su futuro posible.
Es mediante la taxonomía que existe la posibilidad de conocer el orden en lo diverso de la vida y de las relaciones establecidas entre las distintas comunidades y el entorno.
Los organismos se organizan jerárquicamente dentro de la taxonomía, existiendo así distintos grupos, cada uno en un determinado espacio. El principal se conoce como taxón y el nivel en el que se encuentra ubicado, categoría.
De esta manera dentro de determinado reino, cada especie es agrupada en géneros, los cuales a su vez están divididos en familias que son clasificadas en órdenes.
A pesar que se suele entender como animales en general a los mamíferos y vertebrados, dentro de dicho reino hay otros muchos grupos.
De hecho, se ha descubierto que un 95% de las especies que hasta ahora se conocen, pertenecen al grupo de los invertebrados, es decir: aquellos que carecen de vértebras.
Origen de la clasificación de la especie
La necesidad de estudiar el mundo y en particular la vida, tiene sus orígenes desde tiempos ancestrales. El propio Aristóteles, en el siglo IV A.C, realizó una clasificación tanto de animales como de vegetales.
Esta clasificación de la especie posee el basamento en una premisa: todos los seres vivos pueden ser agrupados en conjuntos y niveles, que a su vez es posible que sean contenidos por otros grupos, y mostrar de esta manera características similares con aquellos que forman parte de su propio conjunto.
Un ejemplo de esto puede ser que dentro del grupo de los mamíferos están los primates, todos poseen ciertas características en común que se diferencian muy claramente de otros animales que no pertenecen al grupo, como por ejemplo: reptiles o aves.